lunes, octubre 06, 2008

Pide un Deseo...


- ¿Y la maleta?
- No hace falta. Corre, cierra los ojos, no los abras...
- ¿ya?
-¡espera! dame tiempo, impaciente!
- ¿ya?
- Aún no.
- ¿ya?
- Ahora sí! ya puedes abrirlos...¡¡¡Pide un deseo!!!


La vida es como tablero de juego en el que cada casilla te depara una sorpresa. Un largo camino por recorrer y en el que hay que saber disfrutar de cada momento, porque al contrario que en “la Oca” no hay opción de retroceder.

No desaproveches las oportunidades. Lo que a primera vista parece una simple llave, puede acabar abriéndonos las puertas de la felicidad.

No deseches los recuerdos, guarda cada uno de ellos en un pequeño álbum de tu memoria. Antes o después los necesitarás.

Canta a voz en grito sin importarte lo que piensen los demás. Busca la banda sonora más adecuada a cada momento. La música siempre será testigo de tu vida, de tus momentos más alegres, de tus momentos más tristes…

Cuando la vida parezca no avanzar, no desistas. Apunta en una pizarra tus objetivos y lucha por conseguirlos. El esfuerzo siempre tiene recompensa.

Respira hondo. Capta en el ambiente todos esos olores que te hacen recordar. Siéntete vivo.

Nunca dejes que muera el niño que hay en ti. Juega, rie, compite, salta, llénate de arena…Olvidate por unos instantes de los temores y vergüenzas. Déjate llevar como una hoja en Otoño empujada por el aire. Colúmpiate alto, muy alto…

Da siempre la cara pero entrena la habilidad de pasar desapercibido. Hay momentos en los que necesitarás que ni los más cercanos sean conscientes de tu presencia.

No temas expresar tus emociones. Tras leer un texto, tras ver una película…haz saber al mundo que las lágrimas no sólo acompañan a la tristeza, también a la emoción y la alegría.

Descubre tus habilidades ocultas, tus puntos fuertes. Compártelos. Una vez encontrados te darás cuenta que posees la fuerza de un río al que es imposible parar su curso.

Nunca dejes que se apague la vela de tus mejores noches. Cuidala, mímala, arrópala, vigílala incluso al dormir. Sigue maravillándote con su luz al igual que el primer día. Aliméntala como se alimenta un candil de aceite.


Entonces, sólo entonces, habrás llegado a la última casilla. La casilla de la felicidad plena.


Cerró los ojos...y sopló.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

La felicidad plena se alimenta de trozos de tarta sin necesidad de cuchara, de empanadillas y rebozados acompañados de aceitunas con lela, de merenderos nocturnos que aparecen y desaparecen en cualquier cruce, de cafés que se toman en cafeterías con ventanas que hacen las veces de puertas, con porteros de discoteca que hacen pesas porque son feos, con olor a romero sin ser romero, con olor a azahar sin ser azahar, con sana sana culito de rana, con cenas en vajillas del siglo XIX, con vino, con sidra, con tierra en la cabeza, con amigos, con buena gente...

Siguiente nivel, extra bonus...¡¡a por él!!

;)

Feliz cumpleaños "...." de mandarina

¿Soplo contigo?

Anónimo dijo...

sí...dar cera...pulir cera...be water

Anónimo dijo...

Y que no falte cera para pulir... Bee.. feater my friend.