Estos móviles son cada vez más modernos...Sí, eso que veis ahí aunque parezca increíble se trata de mi teléfono. No es muy práctico ni tampoco demasiado manejable...pero nadie me negará que al menos es original y muy útil en momentos de apuro ya que ya no es necesario marcar el 112 porque el SOS viene de serie.
Bueno, os seré sincera...si antes llego a publicar una entrada con acciones estúpidas, antes se me cae el móvil al mismísimo retrete! (limpio, todo hay que decirlo...) .
Fue cuestión de segundos lo que estuvo sumergido en tales aguas ya que actué como una mismísima heroína. Un impulso incontrolable hizo que lanzara mi mano en su rescate sin pensarlo ni tan siquiera dos veces. (Cuando se me calló el cepillo de dientes, he de reconocer que me llevó mi tiempo el pensar si rescatarlo o dejarlo allí a modo decorativo de "mini-escobilla incorporada" por los siglos de los siglos).
Tras hacerle el boca-clavija y ponerle el secador, era lamentable ver cómo su pantalla iba perdiendo vida por momentos (Dios mio, ¿Cuántos móviles pedidos o rotos llevo ya?). Finalmente tras unos "chisporroteos" luminosos, su luz se fue, aunque a pesar de ello su fortaleza le hacía seguir funcionando...
En momentos como éste es cuando hay que echar mano del libro de "Los trucos de España en Proyecto", y mirar el apartado: "Móviles suicidas". Allí encontré la solución a mi problema,"...Introducir el móvil mojado en arroz para que absorva toda la humedad...". Y así lo hice, porque total...de perdidos al río (o al desagüe).
Esta mañana cuando lo encendí, es cierto que había recuperado la luz que había perdido...pero hacía cosas extrañas y además me anunciaba que su batería se acababa. Solución: "Enchufar batería y volver a meter en arroz por si las moscas".
No se si de ésta saldrá un móvil con sabor a paella valenciana o granos de arroz con politonos, pero por probar....que no quede.
¡Mañana os cuento!
Bueno, os seré sincera...si antes llego a publicar una entrada con acciones estúpidas, antes se me cae el móvil al mismísimo retrete! (limpio, todo hay que decirlo...) .
Fue cuestión de segundos lo que estuvo sumergido en tales aguas ya que actué como una mismísima heroína. Un impulso incontrolable hizo que lanzara mi mano en su rescate sin pensarlo ni tan siquiera dos veces. (Cuando se me calló el cepillo de dientes, he de reconocer que me llevó mi tiempo el pensar si rescatarlo o dejarlo allí a modo decorativo de "mini-escobilla incorporada" por los siglos de los siglos).
Tras hacerle el boca-clavija y ponerle el secador, era lamentable ver cómo su pantalla iba perdiendo vida por momentos (Dios mio, ¿Cuántos móviles pedidos o rotos llevo ya?). Finalmente tras unos "chisporroteos" luminosos, su luz se fue, aunque a pesar de ello su fortaleza le hacía seguir funcionando...
En momentos como éste es cuando hay que echar mano del libro de "Los trucos de España en Proyecto", y mirar el apartado: "Móviles suicidas". Allí encontré la solución a mi problema,"...Introducir el móvil mojado en arroz para que absorva toda la humedad...". Y así lo hice, porque total...de perdidos al río (o al desagüe).
Esta mañana cuando lo encendí, es cierto que había recuperado la luz que había perdido...pero hacía cosas extrañas y además me anunciaba que su batería se acababa. Solución: "Enchufar batería y volver a meter en arroz por si las moscas".
No se si de ésta saldrá un móvil con sabor a paella valenciana o granos de arroz con politonos, pero por probar....que no quede.
¡Mañana os cuento!
1 comentario:
Jajajajajajjajajajajajajajaj. Ojo con dejar el móvil caliente dentro del paquete de arroz...que te sale un plato de arroz a la cubana fijo!!.
De todas formas míralo por el lado positivo y lógico...si el móvil se cayó al inodoro es porque sería "una caca"..;)
Descanse en paz sin cobertura eterna por los siglos de los siglos. Amén.
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