Más comunmente llamado Gatallina. Se trata de una animal que vive en estado semisalvaje en 30m2 del territorio leonés. Se alimenta a base de sandwiches o cualquier plato con comida que apoyes sobre la mesa o encimera de la cocina. En ocasiones puede sentir curiosidad por probar café o té, pero su mayor afición es chupar la boquilla de tu botella de agua...
Posee fijación por tirar al suelo todo aquello que tengas encima del escritorio: bolis, papeles, gomas, clinex, tazas y un largo etc para posteriormente huir con ello, un instinto asociado a su parentesco con las urracas ibéricas.
Le encanta sentarse encima del ordenador portátil, ver a la impresora funcionando y acompañarte siempre que vayas al servicio para sentarse en el bidé y mirar lo qué haces...hagas lo que hagas....ella es así...
No posee reproducción, quizá por eso su agitación las 24h del día. Puede volar de los sofás a la mesa, trepar hasta las encimeras, correr por las paredes, enterrarse bajo los sillones...y todo eso a una velocidad incaptable para el ojo humano. Puedes llegar a pensar que tienes 30 gatallinas por la casa, pero en realidad...solo hay una que se mueve muy rápido.
Ha sufrido una evolución desde sus orígenes, poseyendo en los comienzos un calcetín de dedos a modo de cresta y un plumaje más.....plumeril!, posteriormente la cresta sufrió una mutación, alcanzando la forma actual y desarrolló dos alas a modo de mariquita.
Antes:
Después:
- Beldi -
Posee fijación por tirar al suelo todo aquello que tengas encima del escritorio: bolis, papeles, gomas, clinex, tazas y un largo etc para posteriormente huir con ello, un instinto asociado a su parentesco con las urracas ibéricas.
Le encanta sentarse encima del ordenador portátil, ver a la impresora funcionando y acompañarte siempre que vayas al servicio para sentarse en el bidé y mirar lo qué haces...hagas lo que hagas....ella es así...
No posee reproducción, quizá por eso su agitación las 24h del día. Puede volar de los sofás a la mesa, trepar hasta las encimeras, correr por las paredes, enterrarse bajo los sillones...y todo eso a una velocidad incaptable para el ojo humano. Puedes llegar a pensar que tienes 30 gatallinas por la casa, pero en realidad...solo hay una que se mueve muy rápido.
Ha sufrido una evolución desde sus orígenes, poseyendo en los comienzos un calcetín de dedos a modo de cresta y un plumaje más.....plumeril!, posteriormente la cresta sufrió una mutación, alcanzando la forma actual y desarrolló dos alas a modo de mariquita.
Antes:
Después:
- Beldi -
No hay comentarios:
Publicar un comentario